La UE recorta por primera vez el presupuesto agrícola para el periodo 2014-2020

Agricultores y ganaderos denuncian que la nueva reforma continúa con la desregulación del mercado en beneficio de los grandes distribuidores

Creció entre vacas. Ahora las cuida. Míriam Cassà (29 años) es la única de tres hermanos que ha decidido continuar con el negocio familiar. Estudió un módulo de agricultura ecológica en Manresa y se incorporó, hace ya una década, a la empresa de su padre, Joaquim Cassà (58 años), quien a su vez la heredó de sus progenitores. Entre los dos gestionan una explotación de medio centenar de vacas lecheras en Les Franqueses del Vallès. También tienen conejos y tres hectáreas de trigo y otros cultivos ecológicos, aunque es la leche la que les reporta la mayor parte de los ingresos.

Reportaje publicado en El Periódico de Catalunya el 7 de mayo del 2014 // Marc Espín
Reportaje publicado en El Periódico de Catalunya el 7 de mayo del 2014 // Marc Espín

El problema de la leche, como el de tantos otros productos agrícolas o ganaderos europeos, es que tiene unos costes de producción demasiado elevados para competir en un mercado mundial liberalizado. «El litro de leche de Nueva Zelanda es mucho más barato que el de España porque los pastos que alimentan a las vacas crecen solos», dice Joaquim. «Además, las normativas europeas de medioambiente y calidad son muy exigentes y nos obligan a hacer inversiones que encarecen los costes», añade. Para compensar estas desventajas competitivas, la Unión Europea subvenciona a los agricultores y ganaderos mediante la Política Agrícola Común (PAC), uno de los instrumentos institucionales más antiguos e importantes de Europa. La PAC se lleva la mayor parte del presupuesto comunitario —un 37,8% para el periodo 2014-2020— y determina…

Texto completo publicado en El Periódico de Catalunya con el título: «El gran negocio alimentario«.